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Coaching

Hace algunos años, entré en una profunda crisis existencial. Tras dar muchas vueltas en el terreno laboral, y una vida personal que no me había dado mucha tregua, me encontré en una situación de desesperación total. No sabia quién era, no le encontraba el sentido ni la motivación a la vida, estaba perdida y no sabía cuál era el camino que me haría salir del pozo tan profundo en el que me había metido.
Me empecé a interesar por el mundo de la espiritualidad, la vida no podía ser aquello que estaba viviendo en piloto automático y resignada a lo que viniera. Tenía que haber algo más, las piezas tenían que encajar.
Pronto me di cuenta de que la clave estaba en el autoconocimiento. Debía trabajar en mí, llegar hasta el fondo y mirar en todas esas zonas oscuras que tanto miedo me daban, para luego poner luz en las mismas. Así comenzó un proceso de transformación que fue tan duro como liberador para mí.
Y empezaron a aflorar anhelos que no sabía que formaban parte de mí. Mi esencia por fin empezaba a tener voz y a ser escuchada. Quería trabajar algún día acompañando a las personas a vivir procesos como el que me estaba tocando vivir a mí, para poder hacerles su camino un poquito más fácil y rápido si estaba en mi mano.
Decidí mirar formaciones y ponerme manos a la obra. Fue un proceso bastante frustrante, porque la mayoría de formaciones que encontraba, eran un 80% paja en su contenido. Ya había perdido bastante tiempo de mi vida y no estaba dispuesta a perder
más estudiando un contenido inútil y vacío. Quería algo transformador, y entonces apareció Borja Vilaseca en mi pantalla de YouTube.
Su mensaje me caló bien hondo, y empecé a indagar en el eneagrama. Pronto me encontré ojeando la web de kuestiona, y ahí lo encontré: El máster Mayeutik Coaching
En cuanto vi el contenido, supe que estaba en el lugar correcto y que esa era la formación que estaba buscando. No tenía ni la más remota idea de lo que era un coach, había escuchado algo al respecto, pero la idea que tenía forjada de ese concepto, no se parecía en nada a la realidad. De todas formas, era un máster de autoconocimiento, estaba segura de que hacerlo pondría algo más de luz en mi camino.
Comencé el Mayeutik Coaching en Febrero de 2023, y por el camino descubrí una vocación y me enamoré de la profesión. No sólo salí totalmente transformada, sino que salí con un objetivo claro. Conocí a profesores y compañeros maravillosos, que me han abierto puertas a otras formaciones, experiencias y oportunidades.
Por eso hoy estoy aquí escribiendo acerca de mi experiencia, porque quiero hacerte un favor a ti si estás dudando en qué lugar hacer tu formación, y quiero devolverle el favor a todo el equipo de Kuestiona por cogerme de la mano en un momento tan frágil para mí.
A demás, puedes usar mi CÓDIGO DE DESCUENTO: maria10k con el cuál se te aplicará un 10% en todas las formaciones de KUESTIONA.
Espero que te sirva mi experiencia, y te recuerdo que en Alma Viva contamos con innumerables recursos para acompañarte en tu camino de transformación personal, un camino que como habrás comprobado, yo ya he recorrido.
Suerte buscador/a.

LA ESPIRITUALIDAD

Solemos asociar la espiritualidad con la religión, pero lejos de estar asociada con la religión o con una creencia específica, la espiritualidad es algo intrínseco al ser humano. Es la búsqueda de un significado y un propósito más profundo en la vida.
La espiritualidad no es un destino, si no un viaje de continuo crecimiento y transformación. Un viaje hacia dentro, hacia las profundidades de nuestro ser.
¿Por qué explorar la espiritualidad?
Los beneficios de cultivar una vida espiritual son numerosos y abarcan distintas dimensiones:
• Bienestar mental y emocional: La espiritualidad nos ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión, promoviendo la paz interior y la felicidad.
• Mayor autoconocimiento: A través de la introspección y la conexión con nuestro ser interior, podemos comprender mejor nuestras emociones, valores y motivaciones.
• Relaciones más significativas: La espiritualidad nos fomenta la compasión, la empatía y el amor hacia los demás, fortaleciendo nuestros vínculos con familiares, amigos y la comunidad.
• Conexión con la naturaleza: Nos permite apreciar la belleza y la interconexión del mundo natural, despertando un sentido de respeto y responsabilidad hacia el planeta.
• Sentido de propósito: Nos ayuda a encontrar un significado más profundo a nuestra existencia, guiando nuestras acciones y decisiones hacia un bien mayor.
¿Cómo cultivar una vida espiritual?
Existen diversos caminos para explorar la espiritualidad, y cada persona puede encontrar el que mejor resuene con su ser. Algunas prácticas comunes incluyen:
• Meditación: Dedicar tiempo a la quietud y la atención plena para conectar con nuestro interior y calmar la mente.
• Talleres y formaciones: Salir de nuestra zona de confort y realizar actividades que nos conecten con nuestro fondo y con otras personas con inquietudes similares.
• Lectura: Profundizar en libros, poemas o escrituras que nos inspiren y nutran nuestra alma.
• Conexión con la naturaleza: Pasar tiempo al aire libre, caminar en la playa o abrazar un árbol para sentirnos parte de algo más grande.
• Práctica de la gratitud: Expresar agradecimiento por las cosas buenas de nuestra vida, grandes y pequeñas.
• Ayuda al prójimo: Ofrecer nuestro tiempo, talento o recursos para apoyar a los demás y contribuir a un mundo mejor.

¿Estás listo para embarcarte en este viaje hacia el interior?

Recuerda que no estás solo en este camino. En Alma viva tenemos una comunidad y recursos disponibles para acompañarte en tu búsqueda espiritual. 

¡Comienza hoy mismo a explorar tu interior y descubre la paz, la alegría y el significado que la espiritualidad puede ofrecerte!

Hay que sanar el pasado para poder crear el futuro.

 

MEDITACIÓN

No es fácil definir la meditación en unas pocas líneas, ya que es una práctica realmente completa y beneficiosa.
¿QUÉ NO ES MEDITAR?
Lo primero que suele decir una persona que no ha meditado nunca es:
-Yo no medito porque soy incapaz de dejar la mente en blanco.
Por eso quiero dejar muy claro, que meditar no es dejar la mente en blanco
Puede que tras años de práctica, haya momentos en los que la voz de nuestros pensamientos baje tanto el volumen que apenas sea perceptible. Pero la mente nunca para. De hecho, su misión es estar siempre alerta, recordando, analizando, suponiendo…
Otro de los mitos de meditar, es que su objetivo es relajarnos. Al igual que en el caso anterior, la relajación es uno de los beneficios de meditar, pero tampoco es un objetivo en sí mismo, si no una consecuencia.
ENTONCES, ¿QUÉ ES MEDITAR?
Muy sencillo, meditar consiste en convertirnos en nuestro propio observador. En contra de lo que muchos creéis, la meditación es un ejercicio sumamente activo. Hay que estar muy despierto y alerta, para que la mente no nos atrape en su red de miedos, deseos, expectativas y recuerdos.
Es importante iniciarse con meditaciones guiadas para que el instructor/a nos recuerde volver cuando caigamos en la trampa.
Meditar consiste en estar en presente y en total presencia. Observar nuestro estado físico, mental y emocional sin juicio, desde una posición neutra. Habrá días en los que detectaremos tristeza, miedo, euforia o alegría, y meditando aprenderemos a no querer transformar o sustituir aquellos estados a los que nuestra mente etiqueta como “negativos”
Simplemente los identificaremos y dejaremos que sigan su curso.
Del mismo modo actuaremos con nuestros pensamientos. Siempre aparecerán pensamientos ligeros del tipo “tengo que comprar manzanas” y otros más pesados como “mi ex me hizo mucho daño.” De lo que trata meditar es de no engancharnos al relato que nos ofrece el pensamiento, de no morder el anzuelo. Si aprendemos a no darle cancha a la mente, esta irá bajando su velocidad.
Habrá días en los que estaremos más inquietos, y otros más tranquilos. Hay que ser paciente y constante. Hay varias técnicas que nos ayudan a anclarnos en el momento presente, como la experiencia viva del cuerpo o la respiración, de la que os hablaré en la próxima entrada.

Cada día que meditamos, aunque sea solo cinco minutos, vamos plantando unas valiosas semillas que darán frutos mucho antes de lo que imagináis.

¿ENTONCES, QUÉ BENEFICIOS OBTENGO AL MEDITAR?
– Calmar la mente
– Relajar el cuerpo
– Reducir los niveles de estés y ansiedad
– Mejorar la calidad del sueño
– Actitud positiva ante los retos diarios
– Disfrutar más de las pequeñas cosas
– Aliviar la depresión
– Mejora el sistema inmune y digestivo
– Favorece la autoestima
– Aporta paz, armonía, equilibrio y felicidad
No dejes pasar ni un día más sin adentrarte en esta práctica que transformará tu vida desde la raíz.
Contacta con Alma Viva y empieza a formar parte de nuestra comunidad, nuestros talleres grupales, formaciones, masterclass y sesiones individuales.

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